No DOY MI BRAZO A TORCER

 NO DOY MÍ BRAZO A TORCER.

"NO DOY MÍ BRAZO A TORCER". ¿cuántas veces has dicho esto?  ¿No nos damos cuenta que es un signo grande de nuestra PREPOTENCIA y ORGULLO? ¿Qué pasa cuando es tu propia familia con la que NO QUIERES TORCER el BRAZO?

¿ACASO no hemos leído lo que enseñó Jesús? << Si ALGUIEN te da una BOFETADA en una mejilla, OFRÉCELE TAMBIÉN la OTRA mejilla. Si alguien te exige el abrigo, ofrécele también la camisa>>. Lucas 6:29 NTV

"Es difícil OFRECER la OTRA MEJILLA, cuando humanamente lo que quisiéramos hacer sería PAGAR con la MISMA MONEDA a aquellos que nos agravian". Pero cuando ponemos la otra mejilla a alguien, no solo estamos mostrando nuestra humildad sino también la madurez que tenemos del carácter y lo importante que es la otra persona.

Yo era una de las que decía mucho: ¡YO NO DOY MÍ BRAZO A TORCER por NADA del MUNDO!  pero luego comprendí que mientras no trabajara en mi orgullo, jamás lo haría. La misma vida me enseñó a torcer mi brazo, y lo he ido aprendiendo por el ejemplo que algunas personas me han dado al torcer su brazo a mi favor.

¿Alguna vez ha pensado en lo que pasaría si Dios dijera: "NO VOY a DAR el BRAZO a TORCER con el PECADOR, HARÉ que PAGUE UNO A UNO POR SUS PECADOS"?

La humanidad no tenía ningún mérito para que Dios le perdonara tanto pecado y decidiera TORCER su BRAZO a su favor, y ENVIARA a su hijo Jesús a morir por ella. Pero fue lo que hizo, decidió enviar a Jesús para reconciliar al mundo con él, y para ello decidió no tomar en cuenta nuestro pecado.

<<..... Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación: esto es, que en Cristo, Dios estaba RECONCILIADO al MUNDO CONSIGO MISMO, NO TOMÁNDOLE en CUENTA sus PECADOS y encargándonos a nosotros el mensaje de la reconciliación>>. 2 Corintios 5:18_19 NVI

"La única forma de que decidamos TORCER EL BRAZO con los demás, se da cuando decidimos PERDONAR las OFENSAS que nos han hecho", porque las ofensas traen como resultado heridas en la persona que las sufre, y esas heridas con el paso del tiempo se transforman en sentimientos de ira, de rencor, en deseos de venganza.

"Dios espera QUE NO SOLO DEMOS EL BRAZO A TORCER, sino que NOS CONVIRTAMOS en RECONCILIADORES". Si él pudo perdonarnos sin que hiciéramos nada para lograrlo, cuánto más nosotros debemos extender esa misma misericordia a todas las personas.

Desafíos para hoy:

1_ ORA al Señor para que te MUESTRE esos DEFECTOS de tu CARÁCTER, que te impiden dar el brazo a torcer con los demás.

2_ EVALÚA si el DAÑO que te HICIERON son más fuerte, que los daños que tú también ocasionas a otros.

3_ TOMA la DECISIÓN de PERDONAR los AGRAVIOS de otros.

Recuerda: "SIEMPRE ES EL MOMENTO APROPIADO PARA HACER LO QUE ES CORRECTO". Martín Luther King.

Ximena de Camacaro